Buenos Aires. Hugo Moyano reunió con la cúpula de la CGT con el objetivo de
“reflexionar” sobre su relación con el Gobierno nacional luego de que la
presidenta Cristina Fernández de Kirchner casi excluyera a los
gremialistas de las principales candidaturas legislativas del
oficialismo.
No solamente estamos para votar, no solamente estamos para
concentrarnos, no solamente estamos cuando nos llaman para una
movilización. Los trabajadores tenemos la herramienta y el instrumento
más importante de la democracia: tenemos la posibilidad de encauzar el
voto y seremos invencibles”, dijo ayer el líder de la CGT al cierre del
plenario, aunque aclaró que la CGT seguirá apoyando al Gobierno.
El camionero aseguró: “La CGT cuenta con más de 12 millones de votos de
trabajadores de todo el país, algunos registrados, otros no”, y reiteró
que si logran “encauzar” los votos, serán “invencibles”. Así, dijo que
es su deseo que un trabajador ocupe el Sillón de Rivadavia.
Sólo desde el poder se modifican las cosas, no desde la presión con la
que se pueden corregir algunas cosas, pero no se las modifica. Tenemos
hombres con la suficiente capacidad para sentarse en la Casa Rosada,
enfatizó el dirigente camionero, quien por las dudas, reiteró: Ese es
el objetivo que tenemos que buscar.
Antes, en su exposición, el secretario de Capacitación de la CGT, Juan
Carlos Schmid, graficó el disgusto de los sindicalistas al expresar:
“Hay una gran parte de la sociedad que cree que esto se edificó del 2003
para acá, pero no es menos cierto que a lo largo de 18 ó 20 años hemos
batallado con distinta suerte para lograr que ese lugar sea destinado a
la clase trabajadora”. Así, Schmid, quien no aceptó formar parte de la
lista de diputados kirchneristas en Santa Fe porque se le ofreció un
lugar sin chances de llegar al Congreso, recalcó que el movimiento
obrero tiene una trayectoria que precede al kirchnerismo y no es deudor
de éste.